Todos nos movemos menos. E incluso si nos movemos por las distintas áreas de nuestra casa, no es suficiente. Tendemos a caer en un estilo de vida sedentario durante los tiempos de aislamiento social. Y lo cierto es que sentarse de vez en cuando para estirar las piernas puede no ser suficiente para sentirse más activo y en forma.
Este sedentarismo es especialmente grave en personas que sufren problemas relacionados con el dolor en las piernas , como la Enfermedad Venosa Crónica, que se estima que afecta a un tercio de la población portuguesa.
Sentir piernas pesadas e hinchadas, entumecimiento o calambres musculares son solo algunos de los síntomas que pueden enmascarar la enfermedad venosa. Cuanto más tiempo pasamos en casa sin ejercitar las piernas, más suelen empeorar. La tendencia a descuidar la alimentación debido a la gran cantidad de comidas que hacemos en casa tampoco ayuda.
Por lo tanto, es crucial prestar especial atención a comer en exceso y mejorar la circulación haciendo ejercicio en casa. Incluso sin ir al gimnasio, puedes mantener hábitos de vida saludables haciendo ejercicio, previniendo así posibles efectos negativos en tu condición física, especialmente en las piernas. Lo importante es que lo hagas con motivación, dedicación y, por supuesto, con regularidad.
Quedarse en casa durante largos periodos puede ser difícil, y mantenerse activo a la vez que se mantiene una dieta saludable puede ser un reto adicional, ya que nos sentimos más relajados cuando estamos en casa. Así que cuida tus piernas no solo levantándote del sofá para mantenerte activo, sino también:
- Levantar la parte inferior de tu cama;
- Masajear y enjuagar las piernas con agua fría;
- Evitar los alimentos que estimulan la congestión venosa, como el café, el té y algunas especias;
- Evitar permanecer sentado o de pie durante largos periodos de tiempo;
- Alejarse de adicciones como el tabaco o el alcohol;
Manténgase cómodo en casa, use ropa cómoda y masajee sus piernas con la mayor frecuencia posible, evitando estar de pie por mucho tiempo. Incluso si su cuerpo no presenta síntomas de dolor en las piernas, la prevención es importante.
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