Retrasar el proceso de envejecimiento, reducir la inflamación y destruir microbios es posible con la ayuda de péptidos, que son versiones más pequeñas de proteínas. Existen varios tipos, cada uno con múltiples usos. Algunos de los más populares son los péptidos de colágeno para la salud de la piel y el antienvejecimiento, así como los suplementos de péptidos de creatina para el fortalecimiento muscular.
¿Qué son exactamente los péptidos?
Según Medical News Today , los péptidos son cadenas cortas de aminoácidos (que también son componentes básicos de las proteínas). Su absorción es más fácil para el cuerpo que la de las proteínas, ya que son más pequeños. Además, penetran la piel y los intestinos con mayor facilidad, lo que les permite entrar al torrente sanguíneo con mayor rapidez.
Los péptidos presentes en los suplementos pueden provenir de fuentes proteicas vegetales o animales, como huevos, leche, carne, pescado, soja, avena, linaza, semillas de cáñamo y trigo. Los bioactivos tienen un efecto beneficioso para el organismo y pueden tener un impacto positivo en la salud humana, ya que algunas investigaciones sugieren que son responsables de reducir la presión arterial, la inflamación, mejorar la función inmunitaria y actuar como antioxidantes.
Beneficios de los péptidos en tu rutina de cuidado de la piel
Siempre surgen nuevos ingredientes que prometen nutrir profundamente la piel y revitalizarla. Y aunque algunos no son tan beneficiosos como parecen, los péptidos son otra historia.
Los péptidos pueden penetrar la capa externa de la piel y, en lugar de permanecer solo en la superficie, pueden hidratarla en profundidad. Actúan como mensajeros para otras células, indicándoles que produzcan más colágeno y elastina.
Dado que se trata de aminoácidos que componen ciertas proteínas necesarias para la piel, en concreto el colágeno, su adición a productos cosméticos o ciertos suplementos puede estimular la piel a producir mayores cantidades de esta sustancia proteica, algo que puede dar como resultado una piel más firme y de aspecto más joven.
Aunque nuestro cuerpo produce colágeno de forma natural, lo cierto es que, con el tiempo, su producción disminuye sustancialmente, algo que puede hacer que la piel luzca más arrugada, menos uniforme y menos luminosa.
La barrera cutánea puede verse dañada por la exfoliación excesiva, la exposición al humo del cigarrillo, otros contaminantes o incluso la falta de sueño. Sin embargo, los péptidos también funcionan como la línea de defensa del cuerpo contra todos estos factores, así como contra las bacterias, los rayos UV, la contaminación y otras toxinas, contribuyendo a la construcción de una barrera cutánea más fuerte.
Además, como los péptidos también forman parte de las fibras de elastina, otro tipo de proteína, la piel puede lucir más uniforme y revitalizada.
Acerca de la elección de productos peptídicos
Existen varios tipos de productos peptídicos disponibles en el mercado. Puedes elegir un producto como un sérum o una crema hidratante que tenga un contacto prolongado con la piel, por ejemplo.
Revisa la etiqueta del producto y elige los demás ingredientes con cuidado. Los péptidos funcionan bien en combinación con antioxidantes, vitamina C y ácido hialurónico. Lo ideal es que los péptidos aparezcan casi al principio de la lista de ingredientes.