¿Qué significa para ti la felicidad? ¿Crees que solo puedes alcanzarla si ocurre algo externo? Al parecer, no es así. Nuestra biología evolutiva nos dice que estamos programados para prosperar, ya que nuestro cerebro proporciona una gran cantidad de sustancias químicas que determinan las emociones que sentimos y cómo entendemos y experimentamos la vida.
Cuando te hicimos las preguntas anteriores, probablemente lo primero que pensaste fue en posesiones materiales, personas o experiencias. Y si bien estos son elementos clave, en realidad la felicidad está fundamentalmente relacionada con una experiencia química interna. Hay cuatro sustancias químicas principales que se reconocen como directamente responsables de crear las emociones que nos permiten sentir felicidad y plenitud. En otras palabras, no es nuestra realidad externa la que genera este estado de satisfacción, sino una expresión química generada en nuestro cerebro. ¿No es fantástico?
¿Cómo podemos activar la acción de las sustancias químicas responsables de nuestra felicidad en nuestra vida diaria?
Para activar y potenciar la acción de estas sustancias químicas en nuestro cuerpo y, en consecuencia, sentirnos más felices, es necesario despertar varios elementos fundamentales. Conózcalos a continuación.
Serotonina: la sustancia química de la felicidad
1. Exposición a la luz solar;
2. Contacto con la Naturaleza;
3. Alimentos ricos en triptófano;
4. Buen funcionamiento intestinal.
La serotonina es la sustancia química de la felicidad más conocida, ya que es la que se activa con los antidepresivos. El 95 % del suministro de serotonina del cuerpo se produce en el intestino, por lo que la salud de nuestro microbioma y del tracto gastrointestinal en general es vital para mantener un buen estado de ánimo.
Dopamina: la hormona del bienestar
1. Manifestación de objetivos;
2. Concentración;
3. Logro de objetivos;
4. Alimentos ricos en tirosina.
La dopamina es responsable del comportamiento orientado a la recompensa y la búsqueda de placer. Para obtener una buena dosis de dopamina, fíjate una meta y cúmplela. El simple hecho de fijar una meta con entusiasmo activa los receptores de dopamina, y completar la tarea también activa este sistema. Realizar actos de bondad hacia los demás también aumenta los niveles de dopamina.
Endorfinas: la molécula que alivia el dolor
1. Práctica de ejercicios;
2. Risa;
3. Bailar;
4. Vitaminas del grupo B.
El sistema nervioso central produce endorfinas para ayudarnos a sobrellevar el dolor físico. La forma clásica y más conocida de inducir endorfinas en el cuerpo es mediante el ejercicio y la risa. Estas hormonas también son responsables de enmascarar el dolor y el malestar.
Oxitocina: la hormona del afecto
1. Unión;
2. Emoción y tacto;
3. Compasión y confianza;
4. Aminoácidos.
No necesitas a otra persona para liberar oxitocina. El automasaje o cualquier otro ritual de autocuidado es una excelente manera de producir esta hormona; abrazar a alguien, tomarse de la mano y conectar amorosamente con tus mascotas también son excelentes maneras. La oxitocina, producida en abundancia durante el embarazo y la lactancia, se asocia principalmente con el contacto amoroso y las relaciones íntimas. También estimula la dopamina y la serotonina, a la vez que reduce la ansiedad.
Fuente: Blog de hierbas Anima Mundi.