Si hay algo que no siempre nos resulta fácil hacer, es hacer ejercicio en casa. Quizás te digas que hoy es el día para hacer ejercicio, pero probablemente encontrarás otras cien cosas que necesitas (¿o deberías?) hacer.
Para que no sabotee sus planes ni su rutina de ejercicios, y para que deje de poner excusas, compartimos algunos pasos sencillos que le ayudarán a mantenerse en forma y tonificarse, incluso en casa. Su sala será su gimnasio durante los próximos días. ¿Listo?
Caminando
La gula se apodera de nosotros y arruina el esfuerzo que dedicamos a cada entrenamiento. La báscula no perdona cuando nuestra dieta excede ciertos límites, y es precisamente por eso que hemos creado algunos ejercicios que te salvarán de la culpa y la angustia que surgen al darte cuenta de tu nuevo peso.
Así que puedes empezar por desarrollar el hábito saludable y activo de caminar (con la protección adecuada) durante diez minutos después de las comidas. Después del almuerzo, la merienda o la cena, deberíamos caminar diez minutos para facilitar la digestión y aumentar el gasto energético diario.
¿Sabías que no debemos quedarnos en la mesa demasiado tiempo después de comer? Sin embargo, debemos establecer nuestros propios límites y, al mismo tiempo, ocupar nuestro día con otras actividades que no impliquen comer. Intenta evitar los excesos, ya que esto solo dificultará recuperar el peso que realmente deseas.
Subir y bajar escaleras
¿Vives en un edificio sin ascensor? Si es así, este es uno de los mejores ejercicios que puedes hacer: subir y bajar escaleras. Aprovecha cada oportunidad del día para mantenerte activo y ejercitar tus músculos, sobre todo porque las escaleras son (sin duda) una excelente manera de quemar calorías extra. Evita estar sentado todo el día.
sentadillas
Hacer varias sentadillas por hora también puede ayudar. Intenta sentarte y levantarte varias veces en estas sesiones cortas para quemar calorías, mejorar el equilibrio y la postura, además de fortalecer los abdominales y los glúteos.
A veces, las decisiones simbólicas son las que marcan la diferencia. Recuerda esto y empieza a hacer ejercicio ahora para evitar el sedentarismo.
Meditación
La meditación es el proceso mediante el cual entrenas tu mente para enfocar y redirigir tus pensamientos.
Puedes utilizarlo para aumentar tu nivel de conciencia y reducir el estrés , a la vez que desarrollas tu capacidad de concentración, algo muy importante en esta etapa de nuestra vida.
También hay otros beneficios asociados con esta práctica, como un mejor estado de ánimo y una perspectiva más positiva, autodisciplina y patrones de sueño más saludables.