Nos convertimos en lo que pensamos. ¿Alguna vez has oído algo así? Si estás leyendo este artículo, probablemente sea porque ya has decidido que quieres y mereces una vida aún más feliz.
La manifestación es el acto de atraer lo que deseas a tu vida: un mejor trabajo, un mejor salario, relaciones más saludables, metas personales o cualquier otra situación que busques cultivar más en tu vida diaria.
Se dice que cuando decimos, escuchamos o escribimos una afirmación poderosa, la manifestamos continuamente en nuestro cerebro hasta que terminamos creyéndola. De esta manera, es posible reprogramar la mente y eliminar gradualmente creencias limitantes profundamente arraigadas, reemplazándolas por otras nuevas y empoderadoras.
¿Qué significa manifestar?
Manifestar es creer en una nueva realidad antes de verla. Para comenzar un proceso de manifestación, es importante creer plenamente en ti mismo y en tu poder, como si supieras que lo que deseas ya se está creando.
Cuando nos volvemos más conscientes de nuestros pensamientos y nuestro entorno, empezamos a comprender la conexión entre lo que pensamos y lo que sucede. Ser consciente de nuestros pensamientos es una forma importante de autocuidado, especialmente para evitar la presencia de pensamientos negativos en nuestra mente. Este es el primer paso para crear una nueva realidad.
¿Qué son las afirmaciones?
Afirmar significa declarar algo como cierto. Similar a escribir un diario de gratitud y a la ley de la atracción, usar afirmaciones ayuda a atraer positividad y abundancia a cualquier área de nuestra vida, actuando como una lista de deseos para el Universo.
Las afirmaciones no se centran en el problema. Con una afirmación, centramos nuestra energía en la suposición de que ciertas áreas de nuestra vida siempre han sido exitosas. Al centrarnos en lo bueno, lo negativo disminuye.
Al igual que los mantras, las afirmaciones pueden usarse en la meditación, en un cuaderno, en yoga o simplemente en voz alta. Es importante que estas afirmaciones se pronuncien como si lo que afirmamos ya fuera nuestro, de forma clara y concisa.
¿Cómo utilizar las afirmaciones?
Una buena manera de empezar a usar afirmaciones es elegir un área de tu vida a la que quieras prestar más atención, elegir dos o tres afirmaciones y repetirlas antes de dormirte y al despertar. Así, te dormirás con una mentalidad positiva y empezarás el día con optimismo. Con el tiempo —no lo decimos nosotros, sino los autores y entusiastas del tema—, estos pensamientos se convertirán en tu realidad.
También hay otras formas de utilizar tus declaraciones:
Repítelo en voz alta todos los días;
Escríbelas cinco veces al día en un cuaderno;
Meditad sobre ellos;
Escríbelas en un papel y pégalas en la pared, en el espejo o en la cartera.
Algunos ejemplos de declaraciones que puedes utilizar:
“Creo que puedo ser todo lo que quiera ser”;
“Tengo la libertad y el poder de crear la vida que quiero.”
“Mis posibilidades son infinitas”;
“Soy lo suficientemente digno para seguir mis sueños y manifestar mis deseos”;
“Soy próspero en todos los aspectos de mi vida.”
No hay lugar para la negatividad en mi vida. Estoy completamente enamorado de mí mismo.
“Estoy rodeado de personas positivas que me ayudan a conseguir mis objetivos”;
“Creo en mí mismo y en el poder del Universo.”
“Salgo de mi zona de confort para alcanzar mis metas y encuentro satisfacción en el cambio y los nuevos entornos.”;
“Mis errores son peldaños hacia mi éxito porque aprendo de ellos”.
Las palabras tienen poder, y es precisamente este poder el que hace que esta herramienta sea tan poderosa. Mírate al espejo o ponte la mano sobre el corazón y repite una afirmación durante unos minutos cada día.
No te limites por las afirmaciones que te presentamos. Puedes crear tus propias afirmaciones y escribir sobre las áreas de tu vida que te gustaría mejorar. Luego, transforma esta información en una declaración positiva. El cambio empieza por ti.